viernes, 17 de diciembre de 2010

“Los padres no deben tenerle miedo a la tecnología”

  

 
 
Los niños aprenden muy rápido a usar aparatos electrónicos como computadoras o videojuegos, pero ¿eso significa que entienden los peligros que encierra un mal uso?
Yo veo dos peligros: uno que no están entendiendo la ciencia que hay detrás de esa tecnología. Porque la tecnología cada vez va a lo fácil,  a que la gente con un botón haga cualquier cosa, al que se le limite su creatividad y su forma de pensar porque ya está solucionado.  

Como el caso de los niños que juegan videojuegos muchas horas al día, por ejemplo...
Se pierden de desarrollar habilidades sociales y otros valores. De hecho un niño que esté con un videojuego es un recreo es un niño solitario, esos niños tiene dificultades después para relacionarse, están emproblemados, quejándose. 


Un niño desde los cuatro años es capaz de ver si algo daña a la persona o no daña, dependiendo de los valores que los padres le hayan inculcado. Desde muy temprana edad los niños sabrían ya distinguir entre lo que está bien y lo que está mal, dependiendo de la escala de valores de su familia. 

¿Desde qué edad puede un niño distinguir entre la realidad y lo que ve en la televisión?
Eso ya sería un poco más avanzado, como a los nueve o 10 años ya están más preparando su pensamiento abstracto y podrían ellos distinguir. 

¿Cuáles son las ventajas y la consecuencias de que un niño viva en una sociedad tan dependiente de la tecnología?
Lo bueno puede ser que le lleve a facilitar la educación, el apoyo a los demás, la comunicación con los demás, en el inculcar valores sociales, por ejemplo, aplicados con objetivos, me parece que es bueno. Pero si sólo es para llenar un vacío porque los padres no están en casa y que se pongan a jugar como una evasión de la realidad, como los videojuegos por ejemplo. Muchos niños que tienen problemas en su casa pasan horas y horas jugando Nintendo, no se dan cuenta ni del tiempo ni de lo que están viendo, solamente es una evasión de la realidad. Es negativo en ese sentido, porque no se dan cuenta de la realidad y no aprenden. 

Hablemos del mal uso de la tecnología. ¿Cuáles podrían ser los efectos a largo plazo?
(La exposición a)  una repetitiva influencia de temáticas que son nocivos, temas de violencia o temas de agresiones que le podrían hacer pensar que la vida es para pasarla, para vivirla solo un rato y no tener un sentido de la vida. Eso ya es grave. Otra cosa podría ser que piensen que eso les da estatus, identidad, yo soy yo valgo en relación a todo lo que tengo, y eso no es así.  

¿Qué pueden hacer los padres para enseñar a sus hijos a utilizar de manera adecuada las herramientas tecnológicas?
También los padres se deben informar sobre todos los efectos negativos que puedan tener a largo plazo. Deben informarse más, estar al día, saber manejar los aparatos, ver el contenido del juego, no tenerle miedo a la tecnología porque hoy día puede perfectamente salir adelante un papá y explicar que cierto contenido no esta bien. Y no dejarse impresionar. Un papá que quiera aprenderlo lo aprende rápido porque la tecnología esta tan fácil que con solo puyar un botón se pueden hacer las cosas. 

¿Podría darme un ejemplo del buen uso de la tecnología para la educación infantil?Yo tengo la experiencia en la parte tecnológica que es un proyecto muy bonito que estaba desarrollando unas organizaciones, que se llama Robótica Pedagógica. Este proyecto se desarrolló con FUSALMO (Fundación Salvador del Mundo), es una organización que trabaja en Soyapango con centros escolares de la zona, son de alta violencia y de muchas necesidades. El año pasado se comenzó con un programa piloto y se sigue desarrollando a lo largo del año.  
A los niños se les pone en grupos, son como pequeñas comunidades, entonces cada día va un grupo, uno en la mañana, otro en  la tarde, y pueden ir a a semana 10 grupos. Se les enseña a programar un robot, a desarrollar un trabajo en equipo, se les enseña a ser creativos, y a programar sencillamente a ese robot para que funcione. Esa es una herramienta para que piensen, para que utilicen la tecnología para el servicio de la educación, desarrollar su propias habilidades. Yo pienso que proyectos como la robótica pedagógica podrían ser buenos en instituciones. Sería de irlos desarrollando este y otros más que podrían tener las personas, reunirse los que hacen tecnología para poder proponer; no sólo usar lo que viene de fuera, sino desde El Salvador poder proponer cuáles serían las necesidades que tenemos y qué debemos desarrollar en nuestros niños y niñas.  Sobre todo los niños de escasos recursos, que son quienes se verían más beneficiados en la parte positiva de una buena robótica pedagógica.  



Poner límites bien claros. En el caso del teléfono, cuánto tiempo se va a usar, si le van a comprar una tarjeta de cuánto va a ser y por cuánto tiempo (tiene que durar ese saldo). Hablar con ellos, decirles cuánto tiempo van a ver televisión, cuánto tiempo van a oír la música o jugar Nintendo. Negociar esos límites y negociar con ellos. Decirles que van a poder ver televisión si antes han cumplido una lista de tareas que les toca hacer. Y sobre todo darles mucho amor para que haya una aceptación de los límites. Si no les dan el amor no van a aceptar límites, sólo van a querer sentirse bien. 

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